Hace unos días veíamos la lista de los atletas homosexuales fuera del armario que participan en los Juegos Olímpicos de Londres 2012 y si algo llama la atención de esa lista, aparte de los pocos que se han atrevido a dar el paso, es que donde hay más homosexuales fuera del armario es en el fútbol femenino –soccer para los americanos-.
Pero además, la mayoría de las lesbianas pertenecen a dos de los equipos con más opciones de ganar: Suecia y Estados Unidos. Las suecas son: Lisa Dahlkvist, centrocampista; Hedvig Lindahl, portera; y Jessica Landström, centrocampista. En el equipo norteamericano encontramos a Megan Rapinoe, otra centrocampista que salió del armario recientemente y que sale con una futbolista australiana, Sarah Walsh, que lamentablemente no se clasificó para los juegos Olímpicos de Londres 2012.
Además, las seleccionadoras de Estados Unidos, Pia Sundhage, y la inglesa, Hope Powell, también son lesbianas fuera del armario.
Mi experiencia futbolística, que es muy limitada, me hace intuir que el fútbol femenino es un buen lugar donde encontrar lesbianas, mi gaydar, que está bastante bien entrenado, se dispara aproximadamente en el 50% de los casos –rectifiquenme si me equivoco-.
Además, me han informado que al igual que los futbolistas masculinos, las futbolistas –lesbianas o no-tienen tendencia a quitarse la camiseta para celebrar goles y esas cosas. Sí, han leído bien, chicas con cuerpos atléticos quitándose la camiseta en medio del campo mostrando abdominales.
De todas ellas la que tiene más seguidoras es Hope Solo, la portera norteamericana –que parece ser hetero-, y que es toda una estrella en Estados Unidos y con una cantidad de fans impresionante –podría ser el Messi del futbol femenino-.
Queens & Kings
