Más de 60 pacientes están anotados y aguardan para someterse a esa práctica en el Hospital Gutiérrez de la ciudad de La Plata, donde se llevó a cabo, en 1997, la primera intervención quirúrgica de este tipo en todo el país.
Aquella primera cirugía, a cargo del médico platense César Fidalgo, alcanzó enorme repercusión y hasta mayo pasado el equipo encabezado por este especialista había logrado con éxito cerca de 40 intervenciones, incluyendo las de hombre a mujer y las de mujer a hombre.
Precisamente en mayo pasado, al entrar en vigencia la Ley de Identidad de Género, el Hospital Gutiérrez comenzó a recibir una “avalancha” de pedidos de pacientes para someterse a las ahora denominadas reasignaciones de sexo.
Fue así que, antes de que se aprobara la nueva ley, en el Gutiérrez había 19 pacientes anotados para cirugías programadas con autorización judicial, y una vez sancionada la norma, y al no exigirse ya una autorización judicial previa, la lista de espera creció a 41 personas.
Ahora, a poco más de un mes de sancionada la norma, ya hay en lista de espera en el Hospital Gutiérrez más de 60 personas de todo el país que esperan su turno para que les sea “reasignado” su sexo, se indicó.
“Esto era previsible, señalaron fuentes del ministerio de Salud bonaerense, y es por eso que el Hospital Gutiérrez se está remodelando para satisfacer esta demanda. Como primera medida, ya se incorporó al servicio otro especialista en urología, y además se realizarán remodelaciones y refacciones en el sector”.
Los voceros citados agregaron: “Entre otras cosas, por ejemplo, se proyecta hacer baños privados, por tratarse de una cirugía íntima, urogenital. Pero además, tanto el Hospital como el ministerio están trabajando para que estas personas en espera realicen un tratamiento integral antes de realizar una cirugía”.
Al aprobar el Congreso la Ley de Identidad de Género, el marco para este tipo de operaciones cambió por completo. Es que la nueva norma que define por identidad de género a “la vivencia interna e individual” de cada persona más allá de su cuerpo, constituye una luz verde para las operaciones de cambio de sexo.
No sólo se eliminó el principal obstáculo jurídico para este tipo de prácticas, sino que además las autorizó explícitamente, ya que según la ley las personas mayores de 18 años podrán someterse tanto a intervenciones quirúrgicas totales o parciales como a tratamientos hormonales para adecuar su cuerpo a su identidad de género autopercibida, sin requerir para ello autorización judicial.
Infobae/Queens & Kings