Un grupo neonazi ha agredido este jueves a varios participantes en una manifestación a favor de los derechos de los homosexuales en la localidad rusa de San Petesburgo, dejando un número indeterminado de heridos, según ha informado la cadena de televisión rusa RT.
Decenas de personas se reunieron en un parque del centro de la ciudad para conmemorar el Día Mundial contra la Homofobia. Las autoridades locales prohibieron la manifestación, por lo que una unidad policial rodeó a los manifestantes, que corearon eslóganes y entregaron globos a los transeúntes.
Poco después, un grupo aún mayor de personas, algunas de ellas portando cruces ortodoxas, amenazaron de muerte a los presentes e intentaron saltarse el cordón policial. Una de ellas consiguió superar el cordón y golpeó con un bate a uno de los manifestantes, que quedó tendido en el suelo hasta la llegada de los servicios sanitarios.
Por temor a que la Policía no pudiera mantener el orden, los activistas abandonaron el lugar y fueron escoltados hasta varios autobuses. Sin embargo, el convoy fue asaltado por un grupo de neonazis, que lanzó bombas de humo y reventó las ventanas del vehículo con piedras y palos.
Algunos de los neonazis consiguieron entrar en los autobuses, golpeando y agrediendo a los activistas antes de que la Policía interviniera y de que los conductores consiguieran sacar los vehículos del lugar.
Los neonazis dirigieron sus ataques también contra un autobús cercano en el que viajaban varios trabajadores inmigrantes. Testigos aseguraron que se escucharon varios disparos, aunque no se publicaron informaciones sobre heridos en este incidente.
Al menos dos activistas a favor de los derechos de los homosexuales han tenido que ser hospitalizados, aunque el balance final no está claro. Por su parte, las autoridades locales no han publicado datos.
San Petersburgo se ha convertido en las últimas fechas en el centro de las disputas en torno a los derechos de la comunidad homosexual en el país después de la aprobación de varias leyes que contemplan el pago de multas por parte de todo aquél que ‘haga propaganda de la homosexualidad ante menores’.
‘La violencia de este jueves es la confirmación de que la legislación anti-homosexualidad está protegiendo a los homófobos, que se sienten libres de mostrar su odio contra los homosexuales’, ha dicho a través de un comunicado el grupo Vijod, que defiende los derechos de la comunidad LGTB rusa y que organizó la manifestación.
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